El UKPDS mostró que las complicaciones a largo plazo de la diabetes tipo 2 pueden evitarse por medio de un manejo intensivo de la glucosa en sangre y de la presión sanguínea: el UKPDS incluyó a casi 4.000 personas con diabetes tipo 2 recién diagnosticada.
El estudio demostró que:
- La diabetes tipo 2 es progresiva con el transcurso del tiempo, y a medida que el páncreas pierde su capacidad de fabricar insulina, se requiere más tratamiento
- La glucosa alta en sangre y la alta presión sanguínea ambas desempeñan un papel importante en el desarrollo de las complicaciones de la diabetes.
Un control de la glucosa en sangre y un manejo de la hipertensión intensivos dieron como resultado menos complicaciones relacionadas con la diabetes, y aproximadamente
- 20% de disminución en las muertes relacionadas con la diabetes
- 40% de disminución en las complicaciones derivadas de la diabetes en la vista, riñones y nervios
- 40% de disminución en el bloqueo de los vasos sanguíneos hacia los miembros inferiores
- 15% de disminución en los ataques al corazón
Por cada 10 mmHG de caída en la presión sanguínea sistólica, hubo aproximadamente un 12% de disminución en:
- Muertes relacionadas con la diabetes
- Complicaciones derivadas de la diabetes en la vista, riñones y nervios
- Ataques al corazón